martes, junio 26, 2007

Un receso.

Mientras la Corte sigue dilucidando el caso Mario Marín, yo escucho y disfruto de David Bowie

lunes, junio 18, 2007

La timbirichización de México

Este es un texto tomado de la revista Eme-equis, que me permito reproducirlo para este pequeño blog de la aldea camotera, pero es que en realidad está chingonsísimo.
Y es la neta, para aquella generación perdida que creció con todo esto:

El Gobierno Timbiriche
por Fernando Rivera Calderón tomado de la página de internet:
http://www.eme-equis.com.mx/072MXDIASEXTRANOS.html

Es de colección
La generación Timbiriche ha llegado al poder. Y no sólo lo digo por Max Cortázar, aquel joven que hace una década se desempeñaba como baterista del viejo Timbiriche y que ahora, junto a Juan Camilo Mouriño (el Benny del gabinete), se ha convertido en uno de los ex Timbiriches más influyentes de la actual administración.
La timbirichización de México es un asunto mucho más complejo, pero no por eso uno deja de preguntarse: ¿qué llevó al joven Max a renunciar al aplauso de las multitudes juveniles por el aplauso íntimo que emerge de las manecitas de Felipe Calderón? ¿Cómo pasa uno de ser baterista de Timbiriche a encargado de Comunicación de la Presidencia? ¿Acaso debemos interpretar que la relación de Calderón con los medios es algo así como golpear platillos y tambores? Bueno, esas son unas muy buenas preguntas que habrá que responder… en otra ocasión.
El estilo Timbiriche de gobernar se percibe por todos lados, es algo así como el soundtrack del sexenio (y espero de corazón que no sigamos cantando la misma canción dentro de 25 años). Por eso cada que escuchamos ese tema de “Tú y yo somos uno mismo” como que aparece la imagen inmaculada de Elba Esther Gordillo y la de Felipe Calderón cantando a dueto cual si fueran Pimpinela.
Y cuando suena “Soy un desastre” sabes que es la voz de Manuel Espino (“El gato rocanrolero”) la que canta y no la de Diego Schoening, y cuando oyes “Me estoy volviendo loca”, no es Thalía ni Paulina, sino Josefina Vázquez Mota que también le canta a Felipillo aquella de “él me plantó, de mí se burló, yo no se lo perdonaré”.
Mientras Kamel Nacif le dice a Mario El Gober Precioso Marín eso de “Hoy tengo que decirte papá” o “¿qué pasó papá?”, Echeverría y el Seguro Social se echan la de “Muriendo lento” y el Ejército Nacional se avienta a coro la de “Me pongo mal”, mientras dispara sobre unos civiles al tiempo que el narco corre, vuela y se acelera cortando cabezas y desmembrando cuerpos. ¿Pasarán “cosas peores” en “eme-é-acento-equis-i-ce-y-o? Bueno, “Si no es ahora, será mañana”, aunque lo más probable es que sea “Cuestión de tiempo” y la “Paranoia” no puede más que “Acelerar”.
Pese a todo Germán Martínez y César Nava caminan de la mano cantando “Iremos juntos”. Ramírez Acuña, con el ceño fruncido como siempre declama en voz baja a su jefe esa de “Con todos menos conmigo” y a Vicente Fox nunca falta quién le dedique la de “Vuelve a la escuela”.
Así es damas y caballeros, la timbirichización de México es una realidad de la que no será fácil librarnos: hemos transformado la cursilería sangrona de estas estrellas postadolescentes en la cursilería sangrienta de un gobierno que le canta a la sociedad “No seas tan cruel conmigo”, pero que ha llenado las calles de militares armados “hasta con los dientes”.
La síntesis de todo esto se encuentra en ese himno calderonista conocido antiguamente como “El baile del sapo” que explica con absoluta claridad la extraña trayectoria que ha seguido nuestra nación desde el inicio de este gobierno: “Un salto das para atrás, y un paso a la derecha”.
Ni hablar, mujer: la generación Timbiriche ha llegado al poder.

Cualquier semejanza con el panismo es mera coincidencia

La timbirichización de México

Marín sí violó Constitución, señala indagación de Corte

El Universal

El gobernador de Puebla, Mario Marín, sí incurrió en violaciones graves a la Constitución al haberse confabulado con diversos funcionarios para detener a la escritora Lydia Cacho y someterla, de manera irregular, a un juicio penal en diciembre de 2005, de acuerdo con los resultados de la averiguación que realizó la comisión investigadora del caso que encabeza el ministro de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN), Juan Silva Meza.
Con base en toda una serie de pruebas que obtuvo la comisión, el ministro solicitó a sus compañeros del Pleno de la SCJN que emitan una recomendación dirigida, entre otras autoridades, a las Cámaras de Diputados y de Senadores, para que se le finquen responsabilidades políticas, administrativas y penales a todos los funcionarios que incurrieron en las violaciones graves a las garantías de Lydia Cacho, entre quienes también se encuentran un magistrado y una jueza locales.

Como resultado de sus investigaciones, la comisión también detectó que la pederastia y la pornografía infantil, que fueron los temas denunciados por la periodista y que motivaron las acciones en su contra, se han convertido en un verdadero problema de Estado que requiere de acciones urgentes para evitar que más niños sigan siendo víctimas de estos delitos en nuestro país.

Tras los pasos de Marín

En los últimos seis meses, el equipo de colaboradores de Silva Meza, dirigido por los magistrados federales Eduardo Alvarado Puente y Anastacio Enrique Escobar, logró recopilar toda una serie de pruebas que les permitieron demostrar que el gobernador Mario Marín fue quien orquestó y movió los hilos de la confabulación que se tejió en contra deLydia Cacho.

Las fuerzas del Estado -de acuerdo con la información recopilada por la comisión investigadora, de la cual tuvo conocimiento EL UNIVERSAL- se movieron a petición expresa del empresario textilero Kamel Nacif, a quien la periodista señaló como protector del pederasta Jean Succar Kuri en su libro Los Demonios del Edén.

Pieza por pieza, la comisión investigadora logró armar, en un informe de poco más de mil páginas, todo el rompecabezas que se tejió en torno a este caso y quedó al descubierto con las grabaciones de las conversaciones telefónicas que se difundieron, a principios de 2006, en las que Kamel Nacif le agradeció al "gober precioso" su intervención en la captura de la periodista.

Las investigaciones en torno a la participación del mandatario poblano en la detención de la periodista partieron del contenido que se reveló en las conversaciones que sostuvo con el empresario, pero, tal como lo estableció el mismo Pleno de la Corte, dichas grabaciones no serán usadas como prueba porque fueron obtenidas de manera ilegal.

La comisión se fijó líneas de investigación a partir del contenido de las conversaciones y a lo largo de las indagatorias logró recabar otro tipo de pruebas mediante las cuales se comprobó la confabulación para detener a la periodista.

Entre otras cosas se comprobó la participación, entre otros, del presidente del Tribunal Superior de Justicia de Puebla, Guillermo Pacheco, y de la jueza local, Rosa Celia Pérez González, en la acción concertada.

Más que recomendaciones

El informe con las conclusiones a las que llegó la comisión investigadora comenzó a circular entre los ministros de la Suprema Corte de Justicia de la Nación desde el jueves pasado y se estima que, sino existe algún contratiempo de última hora, el caso será analizado en el transcurso de la semana que inicia.

Los 11 ministros que integran el Pleno de la SCJN tendrán que analizar el documento para decidir si, como concluye la comisión investigadora, existieron violaciones graves a las garantías individuales de la periodista y si, por estos hechos, es necesario que emitan una recomendación para que los responsables sean sancionados tanto por la vía política como administrativa y penal.

La investigación que llevó a cabo la comisión se llevó a cabo a petición de las Cámaras de Diputados y de Senadores y se sustentó en la facultad que le otorga la Constitución, en su artículo 97, para que la SCJN pueda averiguar violaciones graves a las garantías.

Dicha facultad restringe la actuación de la Corte tan sólo a investigar los hechos y a emitir conclusiones para que las autoridades correspondientes quienes decidan si sancionan o no a los responsables de las violaciones que detecte la Corte.

Como lo tienes tú

El castigo de todos los reporteros es su poco tiempo para mantener una relación sentimental.
Es difícil mantener y cumplir.
Es extremadamente complicado que te entiendan.
Hay un punto en el que por más que quieras cumplir, no puedes y te ves forzado a llevar las relaciones a un punto en el que te vuelves el culpable de todo.
Y es que en el fondo casi nadie te aguanta el ritmo.
En fin, son gajes del oficio y con esos deberás aprender a vivir.

El grupo español Pereza, lo dice mejor que yo:

martes, junio 12, 2007

¿Qué demonios es El Yunque?

Freaks
Un clásico de lo grotesco

M.U.R.O.
(Movimiento Único de Reaccionarios Ojetes)

Papi, papi, ¿qué es El Yunque?
—Mmm, bueno mijito, es… como decirlo… es… ese lugar donde una bola de reaccionarios ojetes se ayudan entre sí para mantener la chamba.


¿Qué demonios es El Yunque?

Es esa sombra que aparece en la oscuridad cuando son las tres de la mañana y vas a hacer pipí. Tienes que correr rápidamente al apagador para prender la luz y mirar que no haya nada o nadie a tu alrededor.
Es ese viento que sientes en el oído sin que haya nadie.
Es “eso” que sabes que existe y que recorre las redacciones, las decisiones del poder, negocia con el gobernador en turno para sacar dinero transformado en obras públicas, y finalmente apoya al candidato del PRI aunque sea un ferviente militante del PAN.
Es una organización que se viste como el Ku-Klux-Klan, matan un chivo y las caderas se las cenan en un mole bien sabroso, mientras realizan sus misas negras aunque para ellos son blancas.
Es “eso” que sabes que está cabrón (Fritz Glockner, dixit) pero que existe.
Es “esa cosa” que prefieres no comentar cuando sabes que estás platicando con un yunquista.
Es un espanto, un ente, un alma en pena, un espíritu chocarrero que sólo es tomado como burla o sorna.
Es el coco, aquél que no lo ves pero te jala las patas en la noche cada que te vas a dormir.
Es “eso” que sólo la prensa de los iniciados retoma como los grandes conocedores del PAN y sus vericuetos.
Es el arma que usan los panistas que desean chamba como Genaro Ramírez y Luis Paredes, Héctor Montiel y compañía. “El que no chilla no mama”, ¿verdad?
Son esos comentarios que sueltan los panistas frente a ti sobre los cursos que han recibido de adiestramiento y adoctrinamiento, pero que ponen cara de “tú sabes de qué hablamos” para que tú no sepas de qué hablan realmente y todos, hasta tú, se hagan pero bien pendejos con el tema.
Es todo eso que huele a sotana vieja de padrecito caliente.
Es “un alma en pena que va arrastrando cadenas de condena”, Lucía Méndez en el pecado de Diana Salazar.
¿Es todo aquello que querías saber acerca del sexo pero que temías preguntar?, Woody Allen says.
Es todo aquello que tanto criticamos pero que ahora en eso nos hemos convertido.
Pues sí, es eso y más.
Todo mundo habla de El Yunque, recorre esquinas, invade pensamientos, decide convenciones y asambleas, impone candidatos, negocia con gobernadores (Melquiades, Marín, Piña Olaya, etc.), determina consensos, alimenta a periodistas quienes también militaron en esa organización.
Y todo eso continúa en las sombras.
En el número más reciente de Reporte Índigo se presenta un superreportaje sobre Acción Nacional y la lucha entre Felipe Calderón y Manuel Espino Barrientos.
La unción de César Nava como un posible punto de equilibrio entre los yunquistas de Espino y los doctrinarios de Felipe Calderón.
En uno de sus capítulos viene el punto que más nos interesa y del cual retomo como parte de esta columna, ya que nos metimos al espinoso tema de esa organización clandestina.
Resulta que Reporte Índigo, que dirige el chingonsísimo periodista Ramón Alberto Garza, presenta una de las listas que se repartieron en la reciente asamblea nacional del panismo, en la que tundieron con abucheos al agallón mafafas del blanquiazul: “Je, je, je, muchachitos, je, je, je”, es decir, a Manuel Espino Barrientos.
Pero para dejarnos de largos preámbulos retomo los nombres y la información que todo mundo quiere escuchar, pero que teme preguntar.
Dice el Reporte Índigo:
“Una de las listas que se repartieron. Desde las filas de El Yunque fueron repartidas tres listas de miembros a los que se debía apoyar para entrar al Consejo Nacional. La idea era no concentrar los votos en sólo 50 nombres, sino diversificarlos para lograr más asientos. De esa lista, los 36 nombres en azul corresponden a quienes sí alcanzaron un lugar”.
Y aquí mis queridos amigos vienen los nombres que según el informante de Reporte Índigo son afines yunquistas.
Sólo me remitiré a los poblanos —el morbo es el morbo, me cai:
1. José Antonio Díaz García.
2. Francisco Fraile García (No que no tronabas pistolita).
3. Enrique Guevara Montiel.
4. Jorge Ocejo Moreno.
5. Ruth Ramos Barragán.
6. Pablo Rodríguez Regordosa.
Estos personajes, por cierto, sí integran los 18 miembros activos poblanos que son parte del Consejo Nacional del PAN.
Como se recordará, según el estudio hecho se calcula que aunque Espino, nuestro Agallón Mafafas, salió vapuleado, de 85 yunquistas que tenían antes ahora logró colar a 120 en el Consejo. El 40 por ciento de los consejeros son calderonistas, el 45 por ciento son yunquistas y el 15 por ciento son de Santiago Creel y Diego Fernández de Ceballos. Es decir, perdió Espino —Je, je, je muchachito, je, je, je—, perdió pero avanzó su grupo.
Por lo tanto:
—Papi, papi, no me has dicho qué es El Yunque…
—Mmm… ay no sé mijito. Sólo sé que son una bola de ojetes que quieren agandallarse del poder, como lo hicieron los priistas en otro tiempo.


Aquí les dejo el video que presentaron en la columna Campos Eliseos de Kathia D'Artigues en El Universal
Ay nanita


lunes, junio 11, 2007

Instrucciones para cambiar a la derecha




Con estos ligeros pasos serás un niño bonito y adorable que estará por siempre cerrado de su mente, es decir, te verán como un panista más en la nómina de panistas.

Recuerda estas maravillosas palabras si es que ya eres un muchacho yunquista de la bendita ultraderecha:

¿Cuál es la parte más fea de tu cuerpo?
Unos dicen que tu nariz
otros dicen que los dedos de tus pies
Yo creo que es tu mente.

(Frank Zappa, Freak Out 1967)



Paso uno:

Di no al aborto. Cuando un mugroso o pulgoso personaje se te acerque recházalo. Cada que veas una muchacha nalgona y caderona, con unas piernas torneadas repite con golpes de pecho:
"No al aborto, no a la píldora del otro día, no al condón.
Si la presión es más fuerte, grita: "No se me para, no se me para, no se me para".
Si ya no aguantas porque resulta que la muchacha que está frente a ti está buenísima:
"Soy puto, soy puto, soy puto".
Recuerda imaginar a Carlos Abascal Carranza en traje de baño o con un hermoso liguero cada que repitas esto.

Paso dos:

Tóma lo que te dan pero vota por el PAN. Bien, mira, no nos hagamos tan santos. Ya lo dijo mi góber precioso: "No somos santos". Tú primero piensa en el bienestar de tu familia y de tu bolsillo. Imagínate en Angelópolis un domingo cualquiera, con tu señora y la carreola.
Por supuesto te compraste ya un jugo en 100 por ciento natural o un helado en nutrisa.
Tu vas caminando de forma lenta, es tu domingo. En la mañana ya fuiste a Exercite. Ya te endrogaste más con tus tarjetas de crédito de Liverpoll y el Palacio del Fierro.
Pero piensa en la familia Angelópolis, piensa en eso que siempre has deseado.
Bueno, una vez que lograste esto ahora proyectate y transa un poco, piensa que todo lo haces en nombre del Señor.
¿Qué cuál Señor?
No te me apendejes, pues el Señor.
Y si lo haces en nombre del Señor vas a ver que hasta robarás a gusto. Con tal de que te pongas bien con uno de los sacerdotes de las iglesias de Huexotitla o de las Ánimas, pues ya la hiciste.


Paso tres:
¡Bingo!
Tienes que ir a la iglesia de Huexotitla o de las Ánimas. Es tu estatus. Ahí deberas saludar a Paco Fraile o a Ana Teresa Aranda o a Luis Paredes.
Es tu nivel.
Lúcete.
Eres de un ambiente social al cual siempre has pertenecido.

Paso cuatro:
No olvides que eres un inculto por naturaleza. Nada de libros ni pendejadas, para eso está Koinonía, Carlos Cuauhtémoc Sánchez, los programas de Otro Rollo, Salvador Borrego. Ni se te ocurra leer a la Poniatowska, ni mucho menos al peludo ese de Monsivais, fuchi. García Márquez porque no le entiendes, Juan Rulfo, quien sabe quién chingados es.
Dedicate a lo vanal en la cultura, piensa que eres gruexo porque escuchas al TRI en su última época y con Chela Lora. Nada de música al revés ni satánica por favor. Nada de desnudos en el arte, eso es porquería.
Por supuesto, no puedes leer Aura de Carlos Fuentes, es pecado.
No trates de sobresalir que ni esa tú te la crees.

Paso cuatro:
El que obedece no se equivoca.

Paso cinco:
Busca películas españolas como Marcelino pan y vino. Las de Joselito antes de que se volviera mariguano. Marisol, Pili y Myli. Angélica María. No te pongas denso que nadie te la va a creer.

Paso seis:
No olvides Angelópolis dominical con carreola y esposa.

Paso siete:
Sé misógino. Las mujeres sólo sirven para el hogar.

Paso ocho:
Trata de presentarte como una verdadera familia feliz, aunque por dentro quieras matar a todos.

Paso nueve:
Ve a las convenciones del PAN como si asistieras a una congregación cristiana.

Paso diez:
Si has cumplido cabalmente estos artículos, sólo te falta asegurar que tú jamás has robado, ni has metido la mano en la nómina, creete esa mentira, te hará bien engañarte a ti mismo.

Paso once:
Ahora ya eres un Yunque

sábado, junio 09, 2007

I put spell on you

Qué decir de esto cuando lo canta Nina Simone.

Nada.

Porque es verdad, sólo su voz puede lograrlo.

Me cai de madres que sí.

Instrucciones para cambiar a la izquierda


Con estos pequeños pasos tus amigos te verán como bicho raro, otros te tratarán de apestado o apestoso -que es peor- y otros te respetarán:




Paso número uno: déjate crecer la barba.
Paso número dos: compra el periódico La Jornada. Este siempre llévalo en la mano o debajo del brazo. Lee las cabezas por si te preguntan algo o quieren hacer plática de intelectuales.
Paso número tres: Siempre cita a Kapuchinsky. Recuerda que el periodismo -dice el maese Kapu- no es para cínicos. De paso llama a Gabriel García Márquez, Gabo, como si fuera tu gran cuate. Puedes también citar el veintiúnico libro que conoces de Milan Kundera y decir que la sensibilidad es cabrona, así como diosito que ese sí que es cabrón.
Paso número cuatro: Que no se te olvide que puedes ser izquierda, de la ultra, anarquista, budista, carterista o periodista, pero ante todo guadalupano. Es decir, soy así, pero me persigno y voy a misa.
Paso número cinco: De preferencia lleva en la mano algún libro de pastas viejas y desgastadas. Eso te dará un aire mucho más profundo. Pensarán que estás repasando ese texto que has estudiado. Vete a los libros de viejo o usado y ahí gastarás unos 20 pesos. Siempre que vayas a leerlo, métete a un café. Un Itallian Coffe no sería malo, ahí el café es pésimo, pero caen muchas estudiantes de literatura a quien apantallar.
Paso número seis: Si quieres conseguir beca y quedar bien... di que eres amigo de Pedro Ángel Palou. También cita a Volpi y al crack. Tu meta es conseguir una beca por parte del gobierno, así que di que los intelectuales son intelectuales porque la comunidad intelectual así lo intelijo, es decir, que así es porque así debe ser.
Paso número siete: Escribe en un blog.
Paso número ocho: Si quieres ser muy elevado lleva en tus manos el capital de Karl Marx.
Paso número diez: Súmate al Frente Zapatista, si se crea un movimiento para apoyar a los indígenas reprimidos en Timbuctú firma el desplegado. Di que eres simpatizante del presidente legítimo AMLO, que Fecal es una aberración y que Fox es peor que Díaz Ordaz y Echeverría juntos.
Paso número once: Compra un vocho del 76
Paso número doce: Escucha a Silvio Rodríguez, Amauri Pérez, Pablo Milanés, Eugenia León.
Paso número trece: Toma cerveza de preferencia. Si eres aún muy joven emborráchate con whisky. A los estudiantes sólo les da por tomar cerveza y ron y si alguien llega con los güiscachos los vas a apantallar a lo cabrón, y si aún se te ocurre más, di que es una bebida seca, pídelo en las rocas y has sonar los hielitos con el vaso.
Paso número catorce: si eres joven y tienes 18 años y no haces esto eres un pendejo.
Paso número quince: si tienes 30 y sigues haciéndolo eres aún más pendejo, pues de los 30 para adelante ya eres un consumista que aspira a pequeño burgués.

Finalmente: Puedes seguir consumiendo gansitos, sabritas, ver televisa y azteca, comprando paquetes de bimbo, ir a un concierto de shakira y reirte con las pendejadas de la tele.Comer frijoles con queso. Y ver las series de televisión de Fox y la Warner, nadie se va a enterar de que también eres un dichoso aspiracionista en búsca de una beca de la Secretaría de Cultura.

miércoles, junio 06, 2007

Segunda parte

Sólo resta comentar que a finales de los años ochenta, los terribles años ochenta, en el mundo latino se creo un movimiento llamado Rock en tu idioma. Que ya a toro pasado, pues algunas canciones y grupos eran muy pero muy fresas, pero no obstante, parecía ser una propuesta muy fresca ante las porquerías que se escuchaban en la radio poblana.
Por ello, en 1990 cuando Televisa adoptó el rap y caló como una forma de vida, pues yo en lo personal me declaré freak ya que me encabronaba escuchar ese estilo de música.
Para ese entonces, comencé a escuchar a Pink Floyd y la vida cambió para mi.
Además de que cayó en mis manos un libro de José Agustín llamado De perfil, el cual, para la edad que tenía era oro molido.
Fue la misma sensación que me generó cuando leí a Bolaño y sus detectives salvajes.
Me transformaron en el esperpento de 32, casi 33, años de existencia en este cuerpo con apellidos munive y rivera.
En fin, este texto es sólo para complementar el anterior post y el choque cultural que tuve cuando escuché a mis cuates tararear un rap de Caló.
¡Qué asco!
Veníamos de escuchar a la Trinca, a Charly García, a Nacha Pop y estos pendejos que les sale su lado marícón.
Chingada madre.

Nimodo nadie sabe para quien trabaja

La construcción

Desde que inicié este blog, el cual he descuidado mucho últimamente, inició con una plena admiración a Chico Buarque de Hollanda.
Esto ya va a hacer tres años.
Fue en 1999 cuando salía de reportear una nota de la UAP para el periódico El Universal e iba manejando el carro de una compañera. Era un chamaco de 25 años y en la radio escuché por primera vez a Buarque con esta canción, en la versíón en español.
Pasaron 5 largos años y un día merodeando en mix up encontré un disco de éxitos de este cantante brasileño. Desde esa fecha para acá no he podido sacármelo de las venas.
Para el 2004 yo había cumplido 30 años y el rock, que me mueve aún, ya había sido desplazado por Jazz, Astor Piazzolla y en ese momento por Buarque y toda la generación brasileña llamada tropicalismo.
Es de la chingada que desde la preparatoria no escuchas la misma música de tus cuates, pues resulta que cuando cursé primero de prepa, estoy hablando de 1990, estaban aún de moda las fonomímicas y aunque no eran de mi agrado, pues por el desmadre asistías.
Para esto, yo consideraba que me llevaba con los más machines de la escuela y pues de pronto comenzó a sonar la música de un espantosísimo grupo llamado Caló. La canción era "Capitán".
Yo con la mirada sobre los que hacían su representación en el escenario en tono de miren esos pendejos, con qué poco se conforman. Cuando volteo mis cuates estaban tarareando la rolita esa horrible.
Desde ese instante me di cuenta que yo no era igual, que mi futuro era ser un freak y de ahí para acá me doy cuenta que es espantosa casi toda la producción televisa y casi toda la producción azteca-salinas pliego.
Es una mierda, para ser exactos.
Por cierto, en el 2004 cuando invité a salir una muchachilla de muy buenas caderas, nomás porque a huevo quería escuchar canciones del grupo Elefante y de pendejadas así. De plano que me aprieto mi calzón y no es que fuera yo mamón como mi amigo Ulises quien decía que no le llegaba a su vecina porque le gustaban los bukis, no ese no es el caso, el punto es que como que cuesta trabajo escuchar tanta pendejada en la radio.
En fin, basta de rollos y mamadas mías.
Soy fan de buarque y mucho.
Soy intolerante, sí un poco también.